By Alejandro Dumas
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3 Puerta de San Honorato ..................... 8 Puerta de Montmartre ........................ 4 Puerta de Bussy ................................. 4 Puerta de San Antonio ........................ 6 Total, CUARENTA Y CINCO ..................... 45 —Perfectamente —y Loignac gritó con estentórea voz—; ahora, abrid las puertas y entre todo el que quiera en la ciudad. Abriéronse las puertas, y en un instante, caballos, mulas, mujeres, niños y carretas se precipitaron a ellas con riesgo de ahogarse en el apiñamiento que a todos confundía y sofocaba por la estrechez del puente levadizo.
Es verdad, es verdad —contestó Catalina asestando el último golpe contra el corazón de su nuera—; ya debía yo tener en cuenta lo penoso que debe seros, querida mía, el ver que así se descubran las maquinaciones de vuestros aliados, los de Lorena, pues aunque no seáis cómplice en ellas, no por eso dejará de perjudicaros este parentesco. —¡Oh! ¡oh! —exclamó el rey, que quería poner a todos de acuerdo—; en cuanto a eso hay algo de verdad, porque al presente sabemos ya a qué atenernos respecto a la participación que ha tenido el de Guisa en el complot.
Mas ese hombre, ¿quién era? —Una especie de criado que vive con ella. —¿Su nombre? —Ha rehusado decírmelo. —¿Joven o viejo? —Contará de 28 a 30 años... —Pero, dime, ¿invirtió toda la noche en orar y gemir? —No; así que dejó de llorar, es decir, cuando agotó en ella el raudal del llanto, así que se cansó de 61 rozar sus labios contra el frío banco de piedra, se levantó y en vez de dirigirme yo hacia ella, como lo hubiera hecho con cualquiera otra mujer, retrocedí al observar el misterio que debía encerrar semejante estado de tristeza.
Los cuarenta y cinco by Alejandro Dumas
by John
4.2